¿Cómo probar negligencia en un accidente de resbalón y caída?

¿Usted o algún ser querido sufrieron un accidente de resbalón y caída? Además de ser, posiblemente, un evento vergonzoso, los accidentes de resbalón y caída pueden ocasionar graves lesiones. Legalmente conocidos como reclamos de responsabilidad de premisas, los accidentes de resbalón y caída son la principal causa de reclamos de compensación laboral y de días laborales perdidos. Si usted se lastimó en el trabajo o en la propiedad de un tercero, podría tener derecho a una compensación si el accidente fue causado por la negligencia del propietario. Sin embargo, en estos casos, es difícil probar la negligencia, ya que no hay una manera precisa de determinar la responsabilidad del accidente. Un experimentado abogado de lesiones personales puede ayudarlo a transitar este difícil complejo y asesorarlo para determinar si su caso es válido.

Accidentes de resbalón y caída: Determinar responsabilidades

Obviamente, no todos los accidentes de resbalón y caída se deben a comportamientos negligentes. A veces, los accidentes simplemente ocurren. Los accidentes de resbalón y caída se vuelven una cuestión legal cuando el propietario o un tercero responsable de mantener la seguridad de un lugar no cumple con esta responsabilidad. En otras palabras, si su lesión fue causada por condiciones no seguras, puede tener derecho a recibir una compensación. La complejidad de este tipo de casos se deriva de la necesidad de probar que la lesión fue resultado directo del comportamiento negligente del propietario y que las condiciones no seguras también fueron causantes directas de la lesión.

Para que el propietario pueda ser responsabilizado por las lesiones sufridas en un accidente de resbalón y caída, se debe cumplir una de las siguientes condiciones:

• El propietario o un empleado debe haber ocasionado la condición peligrosa que ocasionó la lesión.
• El propietario o sus empleados deben haber estado al tanto de la condición peligrosa, pero no tomaron las medidas correspondientes para solucionarlo de manera oportuna.
• El propietario o un empleado debería haber estado al tanto del potencial peligro. En otras palabras, una persona razonable habría identificado el potencial peligro y habría tomado medidas para mitigarlo o eliminarlo.

Si alguno de estos elementos se corresponden con su situación, es posible que tenga derecho a recibir indemnización por daños y perjuicios.  Al momento de considerar si el propietario podría ser responsabilizado por el accidente, los jueces y el jurado tienen que basarse en el sentido común para determinar si, en efecto, sería razonable actuar de la misma manera en la que actuó el propietario.

Definir razonable

Para que el propietario pueda ser responsabilizado, esa persona (o un agente o un empleado) debe haber actuado de una manera que razonablemente pueda considerarse peligrosa. Estas preguntas son muy útiles para determinar si el propietario actuó o no de manera razonable.

• ¿La condición peligrosa estuvo presente suficiente tiempo como para que el propietario o los empleados la identificaran? ¿Hubo suficiente tiempo como para eliminar dicha condición?
• ¿El propietario o los empleados tienen políticas y procedimientos adecuados para realizar evaluaciones de rutina y detectar potenciales peligros? De ser así, ¿existe un registro preciso de dichos procedimientos y políticas?
• ¿En ese momento, se justificaban las circunstancias que ocasionaron el accidente?
• ¿El peligro de dichas condiciones podría haber sido mitigado por medio de acciones preventivas? (cambio de ubicación, señales de advertencia, iluminación más brillante, etc.)

Cuándo contratar a un abogado de lesiones personales

Debido a lo ambiguo de este tipo de reclamos de responsabilidad de premisas, es importante consultar con un abogado de lesiones personales experimentados lo más pronto posible después del accidente. Un buen abogado podrá aconsejarlo en cada paso del proceso para ayudarlo a obtener la indemnización que merece.

Su abogado hablará con la compañía aseguradora del propietario para defender sus intereses.  Las aseguradoras siempre buscan pagar la menor cantidad posible y, muchas veces, intentan culpar a la víctima para evitar el pago o reducirlo.  Un buen abogado de lesiones personales conoce las distintas estrategias y tiene las herramientas necesarias para ayudarlo a obtener la indemnización que merece.